Crónicas de hostudents en cuarentena: Martina realiza sus exámenes finales online

¿Cuándo has empezado los exámenes y cómo te ha ido?
Empecé el día 28 de abril, me queda uno todavía. Aun no teniendo las notas, creo que me ha ido bastante bien considerando las circunstancias atípicas.

¿En qué sentido ha sido un reto para ti y tus compañeros el estudiar en línea?
Ha sido un reto estudiar en línea, en primer lugar, por la concentración. No es lo mismo estar en una clase con tus compañeros, escuchando y haciendo preguntas durante dos o tres horas que estar mirando una pantalla durante toda una tarde, haciendo preguntas por un chat o escuchando lo que dice un profesor a través de una cámara. La atención es mucho más difícil de mantener y se dispersa con más facilidad. Además, mientras tú estás en clase, las cosas en tu casa se siguen moviendo, conversaciones, actividades, y eso también dificulta.
A la hora de estudiar, soy una persona muy visual, se me quedan mucho las cosas por los gestos y comentarios del profesor en clase, y al no haber tenido eso, me ha costado un poco más preparar los exámenes.

¿Qué puntos positivos ves en las medidas que las universidades han tomado para los exámenes?
Creo que la universidad y los profesores han hecho todo lo posible por garantizar la mayor seguridad y continuidad posible en una situación que es complicada y novedosa para todos. Obviamente se van a cometer errores, porque nadie nace sabiendo, pero creo que desde la universidad ha trabajado mucho por mantener el nivel académico y la seguridad en los exámenes y las clases. Han sido bastante comprensivos con los alumnos y han facilitado lo máximo posible el proceso para nosotros.

¿Algo que mejorarías en las medidas?
Creo que siempre hay lugar para mejorar, y cada profesor lo sabrá con respecto a su examen y su materia. ¡Todos estamos aprendiendo! Es muy diferente comenzar un curso diseñado para ser online que comenzar uno de manera presencial y terminarlo online. Los contenidos se tuvieron que modificar en un tiempo fugaz para que las clases pudieran seguir con regularidad, y yo misma he tenido que cambiar el chip. Creo que hemos sido el conejillo de indias, no tuvimos opción. Lo positivo de esto es que ahora ya sabemos cuáles son los aspectos para mejorar.  

Como estudiante de último año, ¿cómo vives esta situación?
Particularmente, me da lástima terminar en estas condiciones. Nunca pensé que el último día que asistí a clase físicamente, y que pisé la universidad, sería el último. Pensé que sería algo temporal y que podría terminar con normalidad, pero ver que no es así me da bastante pena.

A pesar de que, tanto Martina como todos los estudiantes que se gradúan este año, no podrán vivir sus últimos días de universidad de forma presencial el sentimiento de orgullo por todo el trabajo y esfuerzo durante la carrera es algo que no les falta. ¡Enhorabuena a todos los estudiantes, universidades y profesores! ¡Se merecen un fuerte aplauso!